Adiós, Samara

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Notas Periodísticas, Nueva Era. Edición CDLXXXII.

Guatemala, jueves, 11 de junio de 2015. Por Julio Trejo Pineda. 04:00 UTC -06:00.

El matutino Prensa Libre publicó, el pasado martes 9 de junio, que había fallecido, un día antes, la recordada artista guatemalteca, conocida como Samara de Córdova.

La sucinta información indicando su calidad de actriz internacional, llevóme a recordar cuando conocí a Samara -cuyo nombre de pila era Amparo Rosatti-, al ser ella quien dirigía a un buen número de niños integrantes de radio teatro en la recordada Radio Ciro’s  “La emisora musical” cuyo propietario era don Roberto Castillo Sinibaldi.

Fue, si bien recuerdo, hacia 1955.

Radio teaatro infantil Samara de Cordoba.

Samara de Córdova, adelante, tercera de derecha a izquierda, con el grupo infantil de radioteatro, con sus “script” en la mano, coordinados artísticamente por Samara. Atrás, a la izquierda, ya trabajando en Radio Ciro´s, el autor de esta nota; segundo, Enrique Lossi y quinto, Luis Antonio Paniagua Samayoa, como radiotécnicos en la emisora encargados de la grabación en cinta magnetofónica del programa de 30 minutos de duración (Archivo personal de jtp).

Samara vivía por el barrio Gerona, zona 1.

Irradiaba belleza física enmarcada con natural sencillez y sus dotes de artista radial que, años después, demostraba también en las recordadas radio-novelas del elenco artístico de Representaciones Publicitarias, propiedad de doña Estela Molina S., cuyas oficinas estaban en la 6ª avenida “A” entre 14 y 15 calle, zona 1 de la capital.

De una radionovela (espero mi memoria tenga aún sin daño el “chip”), Frente al pecado de ayer  (de la novelista radiofónica, María Teresa de la Cruz Muñoz), tal fue su audiencia en Radio Ciro’s que el capítulo final se transmitió “en vivo y en directo” en el recordado cine Cápitol, con lleno completo, para presentar después al elenco artístico y personal tecnico de grabación, musicalización y sonido.

Samara, presente entre la “lluvia de estrellas” que, individual y colectivamente, fueron ovacionadas por un público admirador de su actriz o actor radial favorito.

Desde la izquierda, Samara de Córdova, César García Cáceres, Roberto Paz Loreto y  Julio Trejo Pineda, en el escenario del recordado cine Capítol, año de 1957 (Archivo personal de jtp.)

Desde la izquierda, Samara de Córdova, César García Cáceres, Roberto Paz Loreto y Julio Trejo Pineda, en el escenario del recordado cine Capítol, año de 1957 (Archivo personal de jtp).

La vi llorar

Años más tarde, en una oportunidad, cuando el estudio de grabación, de un elenco artístico dirigido por César García Cáceres, estaba ubicado en el 2º nivel del edificio en la 6ª avenida y 14 calle esquina sureste zona 1, frente al otrora llamado Parque Concordia… vi llorar a Samara.

Estaba ella sentada, sola, en uno de los sillones del estudio de grabación, llorando, sollozando, llorando y con el rostro semiescondido entre las manos.

Por razón de mi trabajo entonces, radiotécnico, y ahí, de sonido de radionovelas, entré al estudio de grabación y le pregunté ¿Qué tienes, Samara? ¿Por qué lloras? Por favor, dime… cuéntame tu pena.

Y, enjugándose las lágrimas, me dijo: Mira, pin (así me decía), es que más tarde tengo que llorar cuando haga el personaje en el episodio de la radionovela que vamos a grabar y estoy llorando, ahora, preparándome, para poder llorar realmente, de nuevo y actuar así al momento de estar frente al micrófono.

Tal era la calidad artística de Samara de Córdova, posterior actriz internacional en radio, cine y televisión.

Hay lágrimas físicas, pero también las etéreas, que pueden verterse, en momento dado, por familiares o amistades que al Reino  de Paz han partido.

Más hoy, que a mi memoria has venido, ramo de siemprevivas, impartido, en tu lugar de reposo así dejo, recordada y siempre amiga…  Samara (jtp).

Mensaje recibido

Ileana Alamilla (Periodista, APG; Directora de Cerigua; IPSP) Buenos días estimado Julio, gracias por su trabajo y por compartir aspectos tan importantes de la vida nacional. Lo felicito por su esfuerzo. Hoy tuve la curiosidad de ver la galería de fotos de Presidentes de la APG y me atrevo, con todo respeto, si fuera posible, que pudiera cambiar la mía y sustituirla por la que está en la APG. Muchas gracias y disculpe la molestia. Le mando un abrazo, Ileana.

Luz Isabel Sánchez García (Periodista APG): Fue actriz de calidad. Que Dios la reciba en su seno.

Yolanda Reyes: QDEP.

Leonel Estrada Furlán (Periodista, APG): Muchas gracias Patrón. Aparte de oportuno muy humano. Saludes.

Jaime R. Córdova Palacios (Periodista, APG, CDG e IPSP) Julio: Qué agradable retazo periodístico dedicado a Samara de Córdova. Felicitaciones por este y por haber sido parte del arte nacional. Una de mis hijas se llama Samara Córdova, casi igual. Jaime R. Córdova Palacios.

Carlos Raúl Llamas López (Periodista, IPSP): En efecto estimado “Cheto”. Así era Samara de Córdova. La conocí en Radio Nuevo Mundo, con otra estrella: Esperanza Lobos. Una vez me pidió le fuera a cambiar un cheque a un banco y ahí conocí su nombre y se rio cuando le hice notar otro nombre en el cheque… Pero lo que más que me ha impresionado, es la tenencia de ese archivo de fotos impecables de esas y de otras actividades. Lo celebro, “ Cheto”.

Jorge Arturo Martínez Arriola (Periodista, CDG e IPSP): Diosito le dé su descanso eterno y la tenga en su Santa Gloria.

Eduardo Villatoro (Periodista, APG; columna Palabras de papel, Opinión, diario La Hora; afiliado IPSP): ¡Magnífica reseña de nostálgicos recuerdos! Y vos allí presumiendo de actor de radionovelas. Pero me imagino que eras un extraordinario técnico, como lo sos ahora como periodista y persona modesta, sencilla, humilde, sin hacer alarde de tus conocimientos, colocho rememorativo. Un fuerte abrazo.

Marina Noriega (Periodista APG; CLPG; IPSP): Que noticia tan triste y ella tan lejos. Samara. Trabajamos con ella en las radionovelas Qué bellos recuerdos Adiós mi querida amiga.

Jesús Alvarado Mendizábal (Periodista APG; Socio Honorario ACD; afiliado 1 del IPSP): Muy estimado Julito: Una nota digna de usted con esos recuerdos y esa inmensa admiración a la actriz, a la amiga y a la mujer. Pocas veces encuentra uno una nota luctuosa (como se dice siempre) tan humana y sensible. Es admirable, Julito, cómo usted mantiene ese don tan admirable, unido -como siempre- a su afán de ser útil en todo momento. No sólo lo aprecio sino lo admiro. Reciba usted, estimado Julito, no sólo la condolencia sino el  agradecimiento por el invaluable servicio que proporciona al IPSP con toda la información que nos proporciona, que fortalece el vínculo del afiliado con esta gran Institución. Cordialmente, Jesús Alvarado Mendizábal.

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