Almas en depósito

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Notas Periodísticas, Nueva Era. Edición CCCXCVI.

Guatemala, domingo 12 de julio de 2015. Por Julio Trejo Pineda. 14:00 UTC -06:00.

Es imposible profundizar en el sentimiento de dolor que presiona, hasta el silencio, a quien de improviso, o ya presentido fallecimiento, pierde a su ser querido al quedar por instantes, sellada nuestra voz, atrapada en el “no sé qué decir”.

Somos, en nuestro estar físico aquí en la Tierra, almas en depósito enviadas por nuestro Creador, que no conocemos cuándo, dónde ni el instante preciso en que por causa de Su Voluntad nos llamará a Su presencia.

En la pasada semana, hubo así luto en el hogar de dos apreciables amigos, al fallecer el hermano de Juan Meoño Ramírez y la hija mayor de Carlos Mendoza López, periodistas miembros de la Asociación de Cronistas Deportivos, ACD y afiliados al Instituto de Previsión Social del Periodista, IPSP.

Juan Meoño Ramírez - Carlos Mendoza LópezEl miércoles 8, el deceso en esta capital de don Rafael Roelí Meoño Ramírez, de 57 años cumplidos el pasado 21 de febrero, quien fue llevado a San Rafael Pie de La Cuesta, San Marcos, donde fue velado e inhumado el viernes en el cementerio de la localidad.

El hogar de Carlos Mendoza López también fue lleno de pésame por el deceso de su hija, Diana Pamela Mendoza Gutiérrez, de 25 años cumplidos el año pasado, el 16 de septiembre, fallecida el pasado viernes 10 de julio tras casi ocho días de hospitalización en el IGSS de la zona 9 de esta ciudad.

Recuerdo que a pocos días de nacida conocí a Dianita al visitar el hogar de Carlos –CAMEL (como identifica sus fotos), en la colonia 20 de octubre, zona 5 de la capital.

Ayer, Dianita recibió cristiana sepultura en Los Cipreses, zona 5 de esta ciudad, tras ser velada en la funeraria del referido cementerio.

Nuestra condolencia a Juan Meoño y familia; a Carlos Mendoza, a su esposa María Dominga Gutiérrez de López, y a los hermanos de Diana: José Carlos y Alejandro Antonio.

Recordamos esta oración del poeta, ante la pérdida irreparable:

“Ve en paz, ¡oh! Ser amado.

Entra en el superior estado que según la naturaleza nos enseña acompaña a todo cambio.

Pronto me llegará la hora de seguirte.

Entretanto me congratulo de tu adelanto.

Tu dicha enaltece mi amor.

Siempre por siempre recordaré lo que fuiste para mí.”

(DEP).

enp.jtp. Actualización reciente: Domingo, 12 de julio de 2015. 15:55  UTC -06:00.